Oración vigésimo octavo día de Cuaresma

Hoy es martes, 21 de marzo, estamos en la 4ª semana de Cuaresma. El Evangelio de hoy nos habla de uno de los milagros más famosos de Jesús pero también de los más polémicos, ya que desafía la ley de su tiempo en beneficio del propio hombre.

EVANGELIO DEL DÍA: Jn 5,1-16

Se celebraba una fiesta de los judíos, y Jesús subió a Jerusalén.
Hay en Jerusalén, junto a la Puerta de las Ovejas, una piscina que llaman en hebreo Betesda. Ésta tiene cinco soportales y allí estaban echados muchos enfermos, ciegos, cojos, paralíticos.
Estaba también allí un hombre que llevaba treinta y ocho años enfermo.
Jesús, al verlo echado, y sabiendo que ya llevaba mucho tiempo, le dice: «¿Quieres quedar sano?».
El enfermo le contestó: «Señor, no tengo a nadie que me meta en la piscina cuando se remueve el agua; para cuando llego yo, otro se me ha adelantado».
Jesús le dice: «Levántate, toma tu camilla y echa a andar».
Y al momento el hombre quedó sano, tomó su camilla y echó a andar.
Aquel día era sábado, y los judíos dijeron al hombre que había quedado sano: «Hoy es sábado, y no se puede llevar la camilla».
Él les contestó: «El que me ha curado es quien me ha dicho: “Toma tu camilla y echa a andar’”».
Ellos le preguntaron: «¿Quién es el que te ha dicho que tomes la camilla y eches a andar?».
Pero el que había quedado sano no sabía quién era, porque Jesús, a causa del gentío que había en aquel sitio, se había alejado.
Más tarde lo encuentra Jesús en el templo y le dice: «Mira, has quedado sano; no peques más, no sea que te ocurra algo peor».
Se marchó aquel hombre y dijo a los judíos que era Jesús quien lo había sanado.
Por esto los judíos perseguían a Jesús, porque hacía tales cosas en sábado
.

¡Palabra del Señor!; ¡Gloria a Ti, Señor Jesús!

TEXTO:

Voy acabando mi reflexión. Y lo hago recordando que los evangelios son los que marcan el papel del cristiano, sea laico, presbítero, obispo o Papa, hombre o mujer. Sin distinción en lo esencial. Y lo hacen desde la enseñanza y el ejemplo de Jesús a cada uno de nosotros, en su apuesta por el seguimiento de su mensaje. En este sentido, el teólogo católico Johann Baptist Metz, discípulo de Karl Rahner, afirmaba: «La primera mirada de de Jesús no se dirigía al pecado de los otros, sino a su sufrimiento»; y «el pecado era para Jesús negarse a tener compasión ante el sufrimiento de los otros», cosa que el clericalismo centrado en sí mismo, al servicio de una institución poderosa, olvida frecuentemente, afirmo yo.

El laicado con la sinodalidad de fondo, 7 enero, 2022. Daniel Barbero.

REFLEXIÓN PERSONAL:

Jesús es fiel al compromiso del Padre con respecto a la libertad del hombre. Y pregunta ¿quieres?. No castiga la falta de compasión de los que rodean a este enfermo sino que premia la perseverancia -lleva 38 años enfermo y mucho tiempo esperando- pero mantiene la Fé en que puede curarse. Jesús se centra en la persona, siente compasión y actúa para paliar el sufrimiento. Pero también una vez que está sanado, la exhortación que Jesús nos hace a todos, no sólo al paralítico de no pecar más, en definitiva de seguir nuestro camino amando.

CANCIÓN: Levántate y anda (María Carolina Aldán)

ORACIÓN FINAL:

Señor, que no me falten los ojos para ver y las manos para llevar a tus brazos sanadores a quienes están sufriendo. Que no mire el reloj ni el calendario cuando se trate de cumplir la Misión que me encomiendas cada día.

Amén.

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