Hoy es 22 de marzo de 2018, jueves de la quinta semana de cuaresma. Silenciándonos, nos acercamos, Señor a ti, pidiendo que escuches nuestras súplicas. Míranos, Señor, con Amor, porque hemos puesto nuestra esperanza en tu misericordia
Jn. 8, 51-59
Os aseguro que quien cumpla mi palabra no sufrirá jamás la muerte. [Entonces] le dijeron los judíos: -Ahora sí estamos seguros de que estás endemoniado. Abrahán murió, lo mismo los profetas, y tú dices que quien cumpla tu palabra no sufrirá jamás la muerte. ¿Por quién te tienes? Contestó Jesús: -Si yo me glorío, mi gloria no vale; es mi Padre quien me glorifica, el que vosotros llamáis Dios nuestro, aunque no lo conocéis. Yo en cambio lo conozco. Si dijera que no lo conozco, sería mentiroso como vosotros. Pero lo conozco y cumplo su palabra. Vuestro padre Abrahán disfrutaba esperando ver mi día: lo vio y se alegró. Le replicaron los judíos: No has cumplido cincuenta años, ¿y has conocido a Abrahán? Jesús les dijo: -Os lo aseguro, antes de que existiera Abrahán, existo yo. Recogieron piedras para apedrearlo; pero Jesús se escondió y salió del templo.
Palabra de Dios
TEXTO DOCTRINA SOCIAL DE LA IGLESIA
“En las múltiples situaciones en las que están en juego exigencias morales fundamentales e irrenunciables, el testimonio cristiano debe ser considerado como un deber fundamental que puede llegar incluso al sacrificio de la vida, al martirio, en nombre de la caridad y de la dignidad humana”. La historia de veinte siglos, incluida la del último, está valiosamente poblada de mártires de la verdad cristiana, testigos de fe, de esperanza y de caridad evangélicas”. (Copendio Doctrina Social de la Iglesia nº 570).
REFLEXIÓN PERSONAL
Este relato nos describe un enfrentamiento muy fuerte de Jesús con los dirigentes religiosos del templo. En la antigüedad, debido al dominio y prepotencia de estos dirigentes –sacerdotes, rabinos, imanes, sintiéndose que representaban el Poder Absoluto, no toleran al que les cuestione desde lo más profundo su status y poderes.-personal…El conflicto estalla en cuanto Jesús explica que Dios no era como los jerarcas decían y necesitaban. Jesús, con su actitud, hace ver que Dios está en la vida auténtica, en la convivencia con los pobres, marginados, la gente sencilla, los que sufren…
“Si yo me glorío, mi gloria no vale. Es mi padre el que me glorifica”. Jesús está de tal modo unido al Padre que nada de lo que dice y hace es de él. Todo es del Padre.
Y además, si algo se valora de un servidor es que sea “fiel”, capaz de sostener la palabra dada aun a costa de la propia vida. Para los que han sido fieles, Jesús promete la vida que no acaba jamás. Ser fiel a la palabra de Dios, sobre todo en cuestiones sociales, en nuestro testimonio diario, puede implicarlo todo, incluso la misma vida, como en el caso de Jesús.
Jesús nos invita en este evangelio a proclamar con nuestra vida y nuestras acciones el amor misericordioso del Padre. Sólo el amor a Dios dará la vida y el sentido al mundo. Nuestra misión es la de trasmitir el amor de Dios y su misericordia. Hagamos de nuestra vida una auténtica vocación al amor, viviendo para servir a los demás.
¿Quién es nuestro Dios?, ¿Quién es Dios para nosotros?, ¿Lo conocemos?, ¿De qué modo?, ¿Qué significa conocerlo y su voluntad?
ORACIÓN FINAL
Dios Padre de Bondad, Tú que nos llamas por nuestro nombre, ayúdanos a ser fieles a la Vocación Recibida. Queremos ser sal y luz del mundo, sirviendo siempre éntrelos más pobres, con Amor Efectivo y Afectivo (…) Queremos ser Testigos del Reino viviendo las Bienaventuranzas. Amén