Oración del décimo séptimo día de Cuaresma

Hoy es 13 Marzo 2020, Viernes II Cuaresma, Día de Abstinencia

Hoy la Palabra de Dios presenta la imagen de la viña como símbolo del pueblo que el Señor eligió. Como una viña el pueblo requiere mucho cuidado, requiere un amor paciente y fiel.

Hoy se nos convida también a nosotros no solo a cuidar de la viña sino a dar abundante fruto y a comprometernos en serio con la Vida, con las personas y con Dios. 

EVANGELIO DEL DIA: Mateo 21, 33-43. 45-46

“Dijo Jesús a los sumos sacerdotes y a los ancianos del pueblo: «Escuchad otra parábola. Era un propietario que plantó una viña, la rodeó de una cerca, cavó en ella un lagar y edificó una torre; la arrendó a unos labradores y se ausentó. Cuando llegó el tiempo de los frutos, envió sus siervos a los labradores para recibir sus frutos. Pero los labradores agarraron a los siervos, y a uno le golpearon, a otro le mataron, a otro le apedrearon. De nuevo envió otros siervos en mayor número que los primeros; pero los trataron de la misma manera. Finalmente les envió a su hijo, diciendo: “A mi hijo le respetarán.” Pero los labradores, al ver al hijo, se dijeron entre sí: “Este es el heredero. Vamos, matémosle y quedémonos con su herencia.” Y agarrándole, le echaron fuera de la viña y le mataron. Cuando venga, pues, el dueño de la viña, ¿qué hará con aquellos labradores?»

Dícenle: «A esos miserables les dará una muerte miserable arrendará la viña a otros labradores, que le paguen los frutos a su tiempo.»

Y Jesús les dice: «¿No habéis leído nunca en las Escrituras: = La piedra que los constructores desecharon, en piedra angular se ha convertido; fue el Señor quien hizo esto y es maravilloso a nuestros ojos? Por eso os digo: Se os quitará el Reino de Dios para dárselo a un pueblo que rinda sus frutos.»

Los sumos sacerdotes y los fariseos, al oír sus parábolas, comprendieron que estaba refiriéndose a ellos. Y trataban de detenerle, pero tuvieron miedo a la gente porque le tenían por profeta”.

¡Palabra del Señor!; ¡Gloria a Ti, Señor Jesús!

TEXTO VICENCIANO:

 «Alabo a Dios, porque el final de la misión de Vernon haya sido más de su agrado que el comienzo, y le ruego que le conceda la gracia de mantenerse en el espíritu de mansedumbre y humildad que nuestro Señor le ha dado. La amargura no sirve nunca más que para amargar las cosas. San Vicente Ferrer dice que no es posible obtener provecho de la predicación, si no se predica con entrañas de compasión” (I, 528-529).

REFLEXIÓN PERSONAL

La conocida parábola de los viñadores asesinos, cuyo núcleo original es el anuncio de la muerte de Jesús, parte de esta cruda realidad, para hacernos caer en cuanta que el amor de Dios, manifestado en su propio Hijo, es más fuerte que la muerte. Dios no se resigna a la desidia, a la mentira, ni a la perversidad. Y aunque todo se derrumbe, Él hará que la piedra desechada se convierta entonces en piedra angular.Este Evangelio es una llamada directa a una evaluación serena y sincera del fruto que en verdad estamos dando, bien sea en la vida individual, como miembros de una familia o comunidad cristiana y, también, como integrantes de cualquier trabajo u organización social, religiosa, política o cultural.En su crudeza y sinceridad la parábola de los viñadores destaca la relación que Dios (el dueño de la viña) ha querido y quiere establecer con todas las personas. Todo es de Dios y nos da de lo suyo para establecer una relación de comunión, donde la vida fructifique, se multiplique y alcance para todos.Dios nos entrega lo que es de su exclusiva propiedad: la viña, la creación, las cosas, y hasta nos encomienda personas, para que en lo encomendado, y no en otra cosa, produzcamos frutos buenos y verdaderos. La iniciativa de esta relación la toma el mismo Dios.

Convirtámonos  en auténticos cooperadores de la vida y de Dios.

ORACIÓN FINAL:

Concédeme Señor la alegría de vivir, de compartir lo que soy y lo que tengo, la humildad de renacer que todo viene de ti y la mansedumbre para celebrarlo cada día en comunidad.
Amén

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